Casa ocupa en Reñaca

Sujetos se toman casa abandonada en pleno centro de reñaca para vender drogas donde abunda la basura, las moscas, los ratones y los malos olores. Vecinos han hecho las denuncias y reclamos a todas las autoridades pero nadie interviene este punto negro de un barrio donde imperaban la tranquilidad y la limpieza.

En una verdadera pesadilla se ha convertido para los vecinos de Reñaca, el hecho de que un grupo de 8 a 9 hombres, se haya tomado una casa abandonada, en la esquina de Condell con Angamos, que se ha convertido en un centro de comercialización de drogas, además de la alta concentración de basura, mosqueríos, malos olores y presencia de roedores.

Esta imagen que presenta este hermoso sector, tiene más que preocupados a los vecinos, según señaló Marisol Miranda vicepresidenta de la Junta de Vecinos de Reñaca Costa.

Aproximadamente hace un mes, diversos sujetos llegaron a instalarse en esta casa de una familia Fernández, que de un día para otro, pasó a manos de esta banda que está compuesta por sujetos entre 30 y 50 años de edad, todos ambientados a vivir en las calles y sitios ajenos, encontrando este valioso lugar para llevar a cabo todas sus malas prácticas que están ajenas a vivir en un ambiente tranquilo, limpio y seguro.

Lo más preocupante, es que los vecinos del entorno se han dado cuenta de que allí se comercializa droga, porque es continua la presencia de compradores que llegan en auto o bicicleta.

Lo que más molesta a los vecinos es que se han hecho denuncias a Carabineros, la Municipalidad de Viña del Mar, la Delegación Presidencial, la Gobernación Regional, la alcaldesa de la ciudad jardín y concejales de Viña del Mar y los parlamentarios de la zona, sin que nadie haya reaccionado, quedando los residentes con la esperanza de que estos sujetos decidan cambiarse de barrio por su propia cuenta.

Por cierto que eso no va a ocurrir porque están en un lugar privilegiado donde es fácil comercializar drogas.

Pero estos sujetos no tienen ninguna cultura por el aseo, la limpieza y el despeje de maleza, ya que también cocinan con fuego en base a leña y restos de cartones, lo que podría provocar un incendio de lo cual están prevenidos los servicios de emergencia.

De ahí, que los vecinos piden una intervención mayor, sacando a estos sujetos y ubicar a los propietarios para que cierren el sector y a la vez se desarrolle un trabajo de limpieza porque aparte de la alta concentración de basura en el entorno, los malos olores invaden el barrio ya que estos invasores de lo ajeno, no cuentan con los adecuados servicios sanitarios. A ello se suma el mosquerío y también han aparecido los roedores que se nutren de los desperdicios que acumulan estos ocupantes.

Los vecinos han sacado fotos de todas estas realidades para acompañar las denuncias ante las autoridades, pero hasta la fecha los sujetos siguen viviendo a sus anchas, creándose un punto negro de venta de drogas y de suciedad, que los residentes del sector rechazan de plano.

Lo extraño para estos vecinos es que la autoridad municipal ha solidarizado con estos ocupantes ilegales, ante lo cual Carabineros solo se limita a evitar que los sujetos realicen desórdenes aunque se sabe que son muchos los consumidores que llegan hasta allí a comprar droga.

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