En este primer trimestre del 2024, las cifras no son alentadoras, registrando una caída constante del 14,5%. A medida que disminuye el inventario de propiedades recién construidas, la única manera de mejorar estos índices es mediante la flexibilización de las tasas y la facilitación del acceso al crédito.
Hoy en día, muchos en América Latina encuentran imposible independizarse debido a múltiples factores: salarios bajos, desigualdad, un transporte público ineficiente, congestión urbana, gentrificación y aspectos culturales.
“Sandra Betancur, subgerente de arriendos y administración de propiedades en Tattersal lGDA, señala que mientras en los años 80 y 90 era común que jóvenes de 30 años adquirieran su primera vivienda, las nuevas generaciones suelen hacerlo pasados los 40 años. Hoy, solo el 47,7% son propietarios de la vivienda en la que residen”, comenta.
En los últimos 20 años, Chile ha visto un crecimiento en la demanda de viviendas, especialmente en áreas urbanas y turísticas, creando un entorno complicado para quienes desean comprar una propiedad. Diversos factores han incrementado las dificultades que enfrentan los compradores.
Los precios elevados de las propiedades en relación con el ingreso promedio de los ciudadanos, junto con los rigurosos requisitos para acceder a créditos hipotecarios, son algunas de las principales barreras que impiden la adquisición de una vivienda. Además, la escasez de viviendas en ciertas áreas y la burocracia en los procesos de compra agregan más obstáculos para los interesados en comprar una casa o departamento, explica Sandra Betancur, Subgerente en Tattersall GDA.
“En muchas áreas de Chile, especialmente en las zonas urbanas y turísticas, los precios de las propiedades son altos en comparación con los ingresos promedio, lo que complica para muchas personas el acceso a una vivienda propia. Esta situación no es exclusiva de nuestro país, sino que es un problema global,” señala Sandra Betancur de Tattersall Administración de Propiedades.
“Para adquirir una propiedad, la mayoría de las personas necesita solicitar un crédito hipotecario. No obstante, los requisitos para obtenerlo son estrictos y no todos los interesados los cumplen, limitando así el número de compradores potenciales,” comenta Sandra Betancur, subgerente de arriendos y administración de propiedades en Tattersall GDA.
Adquirir una propiedad en Chile requiere enfrentar una serie de trámites y procesos burocráticos que pueden ser complejos y tardados. Esta situación puede desalentar a algunas personas en su búsqueda de vivienda. Actualmente, el 85% de las familias solo puede acceder a, como mucho, el 8% del total de viviendas nuevas disponibles.
Desde 2016, los salarios reales en Chile han experimentado un crecimiento del 10,8%, pero en el mismo periodo, el precio de las viviendas ha aumentado un 37,7%, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadísticas (INE). Asimismo, las tasas de interés de los créditos hipotecarios han subido un 36%, según datos del Banco Central.
Esta situación se debe a la dificultad de ahorrar para el inicial o pie. “La capacidad de ahorro es nula mientras el costo de vida continúe aumentando y los salarios no crezcan al mismo ritmo”, señaló Sandra Betancur de Tattersall Administración de Propiedades.
Ante estas circunstancias, es crucial concientizar sobre los obstáculos que enfrentan los ciudadanos para alcanzar el sueño de tener una vivienda propia en Chile. Es necesario que diferentes actores, tanto del sector público como del privado, unan esfuerzos para enfrentar estos desafíos y desarrollar soluciones que mejoren el acceso a la vivienda para todos los chilenos.
