El robo a tumbas en varios cementerios de Chile está cobrando cada vez más notoriedad, generando preocupación por la falta de respeto hacia los difuntos y sus familias. En una carta publicada en El Mercurio, el profesor Jaime Ferrer Mir denunció que grupos delictivos, a quienes denominó “bandas delictuales”, trepan los muros de los cementerios durante la noche para robar cualquier objeto de valor que pueda ser vendido en el mercado formal o informal.
El profesor Ferrer Mir describe este tipo de delito como “tumbazos”, destacando que se trata de un acto que atenta contra la solemnidad de los camposantos y la dignidad de los fallecidos. Además, advirtió que estos robos están ocurriendo de manera continua y sin que las autoridades o las administraciones de los cementerios logren frenar esta ola delictiva.
“Es perpetrado continua e impunemente por bandas delictuales que en horas de la noche trepan muros y asaltan tumbas para apropiarse de cuanto objeto pueda reducirse en el mercado formal o informal”, enfatizó en su carta. El profesor también señaló que en el Cementerio Católico de Santiago ni siquiera las placas conmemorativas de bronce están a salvo de los ladrones.
Aunque no hay cifras exactas sobre la magnitud de estos robos, existen denuncias similares en otros cementerios, donde también se han reportado incidentes como funerales con fuegos artificiales e incluso asaltos a visitantes que acuden a rendir homenaje a sus seres queridos.
La creciente inseguridad en estos lugares sagrados ha generado indignación y consternación en la sociedad, planteando la necesidad de implementar medidas de seguridad más rigurosas y de reforzar el respeto por aquellos que han fallecido y por sus familias. Como concluyó el profesor Ferrer Mir en su carta: “Por lo visto, en Chile la paz se ha perdido hasta en los recintos donde se supone debería hallarse”.
