ABANDONÓ EL OFICIO DE BARBERO EN SANTIAGO PARA TRASLADARSE A CUIDAR CABALLOS EN EL SPORTING

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Dejó el oficio de barbero en la capital para asumir como cuidador de caballos en el Valparaíso Sporting Club, ya que se enamoró de los finasangres.

Es la sincera expresión de José Salinas Puebla quien reconoce “que desde niño llegué a las carreras. Como a los doce años ocurrió eso. Todo partió en Santiago, cuando un vecino y un amigo me invitaron a ir al Club Hípico y al Hipódromo Chile. A ellos los veía que siempre iban a la hípica, y la primera vez que fui, me enamoré al tiro. Puchas, los caballos me enamoraron. Ahora estoy trabajando con ellos. Yo soy de Santiago, pero estoy viviendo aquí en Viña”.

Se vino a trabajar como cuidador a la cuidad jardín, con el preparador Marcos Contreras, del haras Matriarca y debutó con “Escaladora”, en la sexta carrera del Sporting, la que lastimosamente no figuró en tabla.

Desde hace dos meses está trabajando en este oficio y vive en la casa de un tío, desde donde se demora unos quince minutos en llegar a las siete y media de la mañana al recinto viñamarino.

“Es muy lindo trabajar con un caballo. Para mí esto es una pasión. Al caballo hay que darle cariño, amor y estar pendiente de el. Hay que estar atento de los nuditos para que estén bien cuando tienen que correr”, apuntó.

En Santiago trabajaba como comerciante e incluso se especializó como barbero, pero más le gustó la hípica: “Le corto el pelo a mis amigos, pero prefiero más los caballos”.

Yasmin Delgado

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